MADRID

Las personas usuarias de la sanidad pública en la Comunidad de Madrid esperan una media de año y medio para ser atendidas en las unidades de dolor

  • CCOO constata falta de personal, de recursos y, en algunos centros, de infraestructuras adecuadas para que estas unidades absorban una demanda en alza en España
  • Alrededor del 26% de la población sufre dolor crónico en España, según el barómetro que analiza nuevos datos sobre el impacto de esta enfermedad en nuestro país
  • Las Direcciones de hospitales como La Paz o Clínico se han negado o no han enviado la información que CCOO ha solicitado

Las unidades de dolor de los hospitales del Servicio Madrileño de Salud tienen listas de espera de hasta 2 años para la primera consulta. Entre los hospitales de tercer nivel, solo el Hospital Puerta de Hierro está dentro de criterios aceptables, con 37 días de espera. CCOO ha constatado que la escasez de personal y, en muchos centros, la falta de estructuras propias para atender a estos pacientes es la que está creando el tapón. Según los datos de la Fundación Grünenthal, el 26% de la población sufre dolor crónico en España. El dolor crónico es un dolor que dura o se repite durante meses o años.

14/05/2024.
Situación unidades dolor SERMAS

Situación unidades dolor SERMAS

En el Hospital de La Princesa, la lista de espera para una primera visita es de un año y seis meses y para entrar en quirófano, una vez que le han diagnosticado y prescrito tratamiento, la espera oficial es de tres meses. Por esta unidad pasan al año 9000 pacientes. Dispone de seis médicos, dos enfermeras, dos TCAEs y un auxiliar administrativo. CCOO considera que hay un déficit de personal para el turno de mañana de tres médicos más, un TCAE, una enfermera, y un auxiliar administrativo para el turno de mañana o de tarde. En esta consulta atiende 30 pacientes/usuarios por día en tratamiento.

En el Hospital Gregorio Marañón el servicio consta de dos enfermeras, entre una y dos TCAEs y tres consultas de anestesistas. Desde la petición de interconsulta hasta la primera visita los pacientes/usuarios esperan entre 8 y 9 meses. Tras la consulta, la espera para tratamiento iontoforesis -un método terapéutico con la capacidad de introducir compuestos químicos o moléculas ionizadas en el interior de la piel- y para bloqueos en quirófanos se tarda entre cuatro y cinco meses.

Desde la Dirección del Hospital La Paz se han negado a facilitar a CCOO los datos requeridos. Durante el pasado año se registraron 1142 consultas en esta unidad y los y las profesionales refieren que están desbordados y que la espera ronda los dos años. Lo mismo ocurre en el Hospital Clínico San Carlos donde no han facilitado los datos.

Gestión óptima

Otro hospital que supera los cánones de gestión óptima recomendada, aunque en menor medida, es el Hospital Ramón y Cajal. En la actualidad trabajan en la unidad de dolor: dos anestesistas, dos rehabilitadores/as, una psicóloga clínica, tres enfermeras, tres TCAEs, dos auxiliares administrativas y un celador.

En este centre la lista de espera es de seis meses para primera visita, de seis a ocho meses para cirugía preferente (pero no se prescriben apenas preferentes). Por el contrario, para cirugías no preferente -el 90%- los pacientes y usuarios se ven obligados a esperan casi dos años. El área de referencia de este hospital es el que más usuarios tiene asignados de todos los centros del SERMAS. Un total de 1.200.000 ciudadanos y ciudadanas censados en Barajas, Ciudad Lineal, Hortaleza, San Blas, Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, Hospital Universitario de Torrejón de Ardoz y Hospital Universitario del Henares.

El Hospital Puerta de Hierro está en el top de una gestión óptima con 268 intervenciones y procedimientos mensuales. En la unidad de dolor de este centro la espera es de 37 días, se dan 170 altas mensuales y un 23% de los pacientes que recibe vienen derivados de Atención Primaria. En el mes de mayo de 2024 había registrados 306 pacientes en la lista de espera. La unidad dispone de un quirófano, tres enfermeras, una TCAE, dos anestesistas y un rehabilitador.

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