Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Asturias | 24 noviembre 2024.

Vivas, libres y unidas contra la brecha salarial

    22/02/2018.

    Hoy, día 22 de febrero, desde la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO (FSS-CCOO) celebramos el Día Internacional por la Igualdad Salarial que este año, a pocos días de la Huelga General feminista convocada por CCOO, adquiere una fuerza reivindicativa mucho más intensa. Además, en el día de hoy el Congreso de los Diputados tomará en consideración la iniciativa de Unidos Podemos para tramitar una ley de igualdad retributiva entre mujeres y hombres. La proposición de ley, debatida en pleno este pasado martes, ha contado con el apoyo de todos los grupos excepto el PP.

    La brecha salarial es una de nuestras grandes razones para ir a la Huelga por los derechos de las mujeres, y es que la discriminación salarial es el resultado de las muchas desigualdades que ellas sufren todavía en el ámbito laboral.  Es un fenómeno de cierta complejidad, pues necesita de un análisis integral de la situación para ser comprendido cosa que muchas veces, por ignorancia o por conveniencia, no se lleva a cabo.

    Si en 2015 el sueldo medio de las trabajadoras españolas fue 5.941 euros menor que el de los trabajadores, no fue porque las empresas paguen sueldos base diferentes a unos que a otras, eso sería ilegal. Las razones de la brecha no dan la cara, hay que buscarlas porque están escondidas.

    Un fenómeno habitual es que los trabajos que hacen unos y otras no se valoran igual, y por tanto no son igualmente remunerados. ¿Por qué hay pluses de peligrosidad por manejar máquinas y no por usar productos químicos que pueden darse en sectores muy feminizados como sanidad o limpieza? Históricamente, se han valorado más los trabajos que han requerido fuerza física que destreza manual; mucho más los trabajos relacionados con la ciencia o la tecnología que los relacionados con la educación o el cuidado y bienestar de las personas.

    La segregación ocupacional y sectorial es un rasgo tozudo y estructural de nuestro mercado de trabajo, y va a seguir siéndolo mientras la educación, la falta de referentes y los roles de género empujen a las mujeres a elegir profesión. Allí donde las mujeres se concentran, suelen ser sectores peor valorados y pagados, existiendo mayor brecha salarial en los sectores feminizados que en los masculinizados. Según el INE, en 'Actividades sanitarias y servicios sociales', con un 79% de mujeres, la brecha salarial es del 27,24%; en 'Actividades inmobiliarias', con un 67% de mujeres, brecha del 32,74%. En cambio, en 'industrias extractivas', con solo un 10% de mujeres, la brecha es del 16,09% a favor de las mujeres; o 'Construcción", con un 9% de mujeres y una brecha del 13,21%.  Únicamente los sectores feminizados en los que existen mucha presencia de empleo público y por tanto de más calidad, presentan una brecha inferior: Educación, con 67% de mujeres en sus plantillas y una brecha salarial del 9,33%.

    Las mujeres dedican menos tiempo que los hombres al trabajo productivo, y es que dedican mucho más tiempo que ellos a los trabajos del cuidar familias y hogares. Las prestaciones sociales van en consonancia a las cotizaciones, y en España el 75% de las jornadas parciales son para ellas, no porque las quieran, sino porque no encuentran trabajo a tiempo completo, o porque les sale más a cuenta que pagar los cuidados para su familia.

    Muchas mujeres no son conscientes de la desigualdad hasta que son madres. La brecha salarial es más pequeña en los tramos de edad más bajos, y comienza a crecer a partir de los 30.  Cuando los hijos e hijas vienen al mundo, son ellas las que reducen jornadas, las que usan las excedencias y demás permisos de conciliación, que las alejan de sus profesiones y de sus puestos de trabajo. La decisión se suele tomar porque ellas ganan menos, y porque criar es todavía "cosa de mujeres". La culpa se inculca a las mujeres desde niñas, y nada hay peor en esta sociedad que una mala madre. La falta de corresponsabilidad de los hombres con el trabajo de los cuidados es todavía abrumadora  (dedicación de 2,5 horas diarias más que ellos según el INE), y aunque avanzamos lo hacemos a un ritmo demasiado lento, a ella se une la falta de servicios públicos para los cuidados de menores y mayores de calidad y asequibles.

    Otra discriminación a tener en cuenta es el techo de cristal o la mayor dificultad que tienen las mujeres para ocupar puestos de poder y responsabilidad. Aunque según el INE en España el porcentaje de mujeres graduadas en educación superior es de un 53,1% ,su participación en los consejos de las empresas del IBEX 35 se sitúa en sólo un 20%. Hay más mujeres graduadas que hombres, pero más hombres graduados que ocupan puestos según su titulación que mujeres.

    En definitiva, como muy bien dice el estudio de la Secretaria de Mujeres e Igualdad Confederal 'La brecha salarial, factor de quiebra democrática', " la brecha salarial es el resultado de la mayor explotación empresarial y desigualdad laboral que sufren las mujeres en su inserción y trayectoria en el mercado de trabajo, que a su vez tiene su origen en la desigualdad social, cultural, educativa, en las tareas de cuidados... etc que soportan las mujeres desde niñas y que las va predisponiendo a asumir roles y tareas diferentes durante su vida".

    Desde la FSS-CCOO tenemos claro que para acabar con la brecha salarial hay que actuar y minimizar todas y cada una de las discriminaciones que sufren las mujeres dentro y fuera del ámbito laboral, en esa lucha estamos y estaremos hasta conseguirlo.

    Desde aquí animamos a la participación de trabajadores y trabajadoras en la Huelga General parcial convocada para el 8 de marzo, así como en las grandes movilizaciones que tendrán lugar en el Día Internacional de la Mujer. 

    Documentación asociada
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