Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Asturias | 24 noviembre 2024.

La FSS-CCOO valora la ampliación de la baja por paternidad aunque demanda permisos igualitarios, retribuidos al 100% y no transferibles

    El pasado día 16 de diciembre, el Gobierno confirmó en rueda de prensa que en 2017 veremos ampliado, por fin, el permiso de paternidad, que pasará de ser de 13 días (15 si se une al permiso por nacimiento) a 4 semanas. Desde la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO (FSS-CCOO) valoramos positivamente la ampliación del permiso de paternidad, aunque nos parece insuficiente. Demandamos permisos parentales igualitarios, retribuidos al 100% y no transferibles, porque conseguir la transformación hacia una sociedad más justa e igualitaria pasa necesariamente por cambiar la organización del cuidado de hijos e hijas.

    22/12/2016.

    El permiso de paternidad fue establecido por la Ley 3/2007 de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres y modificado posteriormente por la Ley 9/2009 para la Ampliación de la Duración del Permiso de Paternidad, donde se preveía su ampliación a 4 semanas para el 1 de enero de 2012. Estos días nos ha sorprendido desagradablemente cómo gran parte de la prensa presenta la noticia como un logro del pacto entre PP y Ciudadanos lo que es, como mínimo, muy poco riguroso. La ampliación no es un logro del pacto entre Gobierno y Ciudadanos, sino el cumplimiento legal establecido en 2009, el cual ha ido posponiendo el gobierno del PP sin considerar las muchas voces, entre ellas la nuestra, que pedían su aplicación.

    El permiso de paternidad simboliza en España la evolución de las políticas para la conciliación de la vida familiar, personal y laboral, que nacieron  en principio para facilitar a las mujeres el poder hacer compatible el trabajo productivo con el cuidado de familias y hogares. Desde esta perspectiva, la realidad puso hace tiempo en evidencia que lejos de ser políticas "buenas y protectoras" para las mujeres, a la larga han sido muy perjudiciales, pues aparte de facilitar la dañina doble presencia, presentan a las mujeres como menos comprometidas y productivas a los ojos de las empresas. La evolución ha consistido en ir dotando a los trabajadores de los mismos permisos que a las trabajadoras, teniendo como objetivo conseguir la corresponsabilidad de ellos en los trabajos del cuidar.

    Los datos dicen que en España ya vamos tarde en la implantación de estas políticas, pues las mujeres siguen responsabilizándose de gran parte de este trabajo que ni está regulado ni remunerado, siendo ellas por consiguiente las que ejercen en gran mayoría los derechos de conciliación (sobre todo los no retribuidos, como la excedencia o la reducción de la jornada) y sufriendo las graves consecuencias que ello genera.
    Igualar el permiso de paternidad al de maternidad aportaría grandes beneficios sociales, pues una mayor implicación de los padres en la crianza de hijos e hijas, además de enriquecerlos a ellos, también sería muy positivo para el bienestar infantil y familiar, además las tasas de fecundidad aumentarían, y daríamos un paso gigante en la igualdad de género.

    El asunto, aunque tiene muy poco protagonismo en las agendas políticas, es muy significativo para una sociedad como la nuestra que envejece a ojos vista, con todos los retos de futuro que ello representa. Las mujeres españolas tienen cada vez menos descendencia y cada vez a mayor edad, (España e Italia estamos a la cola de Europa) conscientes de la penalización que ello representará en su vida laboral. Hay que destacar que el Pleno del Congreso aprobó hace unos meses una iniciativa promovida por Unidos Podemos que propone igualar a 16 semanas los permisos de maternidad y paternidad. La Propuesta salió adelante con 173 votos a favor, dos en contra y la abstención de PP.