La Junta de Personal del Severo Ochoa exige responsabilidades por la gestión del hospital en la crisis de la pandemia

  • El 27% de la plantilla, según los datos de abril, se había contagiado por el COVID-19

19/05/2020.
Hospital Universitario Severo Ochoa

Hospital Universitario Severo Ochoa

La Junta de Personal del Hospital Severo Ochoa de Leganés, uno de los centros con mayor colapso asistencial de la Comunidad de Madrid, durante la pandemia, ha denunciado mediante un escrito las situaciones críticas que se han vivido en el centro y las deficiencias que con las que se han enfrentado durante la pandemia de COVID-19 debido a la “gestión inadecuada” que cargó sobre los profesionales “todo el peso de la crisis y sus consecuencias” y permitió que los pacientes afrontaran la enfermedad en situaciones “indignas”.

En su escrito relatan que las Urgencias Generales soportaron una presión asistencial tres veces superior a su capacidad, durante al menos dos semanas, y no se gestionaron los traslados necesarios para aliviar, tanto a pacientes como a profesionales.

Los equipos de protección individual (EPI) fueron insuficientes para dar la cobertura necesaria y su distribución se hizo, discriminando a categorías y unidades de atención. En distintos momentos se distribuyó material inadecuado que no protegía de posibles contagios.

Negaron mascarillas

Los datos de contagios a fecha 20 de abril -último dato facilitado- era de un 27% del total de la plantilla, uno de los más elevados de entre los hospitales del SERMAS. Los miembros de la Junta de Personal achacan este índice de contagios a: la falta de EPIs; la falta de medidas de seguridad en la Urgencia, a causa del hacinamiento de pacientes que o permitía la distancia de seguridad; la negativa de la Dirección del centro a entregar mascarillas de protección al personal administrativo y a los celadores/as por considerar que “no estaban expuestos y alarmaban a la población”.

La Junta de Personal también denuncia la “opacidad y la falta de transparencia” que ha imperado desde la Dirección del hospital, desde el inicio de la crisis. Negando la información tanto a los representantes de los trabajadores/as como al Comité de Seguridad de Salud un organo formado también por delegados de salud laboral.

Los representantes de este órgano se han sentido, según recoge el escrito, “despreciados” durante toda la crisis y señalan que esta actitud de desprecio continúa por la “ausencia de información y protocolos sobre la desescalada y la vuelta a la actividad ordinaria”. CCOO, UGT, CSIT-UP, SATSE, SAE, AMYTS, CGT y CSIF tienen representantes en este órgano.

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