Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Castilla y León | 23 abril 2024.

14/04/2021

Adiós al decretazo de noviembre

    La cabezonería y el deseo de protagonismo de la Junta de Castilla y León, junto a su línea habitual de ataque frontal contra los empleados públicos y especialmente contra los trabajadores de la sanidad, llevó al vicepresidente Igea a sacar el decreto 2/2020 que permitía a la gerencia regional de Salud mover a sus profesionales a su antojo, e incluso modificar sus funciones y su actividad

    17/04/2021.
    Foto ICAL. Mañueco, Igea e Ibáñez

    Foto ICAL. Mañueco, Igea e Ibáñez

    Esta decisión unilateral de la Junta fue contestada inmediatamente por los sindicatos presentes en la mesa sectorial de Sanidad a instancias de CCOO, hasta el punto de que el propio presidente y los responsables de la consejería de Sanidad se comprometieron a no aplicarlo hasta que fuera negociado en la mesa sectorial. Sin embargo, en ningún momento quisieron negociarlo al mismo tiempo que por la puerta de atrás y de manera sibilina lo iban aplicando a su antojo.

    CCOO organizó concentraciones contra este decretazo y ha estado luchando contra el mismo cada día.

    Finalmente, el pasado jueves 8 de abril el vicepresidente Igea anunció la derogación definitiva de este decreto 2/2020. Sorprende que al mismo tiempo que la consejera de Sanidad anuncia que ya estamos en la cuarta ola, que los casos van subiendo aunque todavía no se aprecia el efecto de la semana santa y se desconoce el alcance que pueda tener, el vicepresidente dice que deroga el decreto teniendo en cuenta la mejoría de la situación epidemiológica, de los datos y la mejora en los hospitales. Contradicción evidente que deja meridianamente claro quién manda realmente en la consejería de Sanidad. Lo que no sabemos es cuánta información se le oculta a la propia consejera, o qué margen de maniobra tiene, por arriba y por debajo de su propio cargo.

    Es evidente que se trata de otra utilización y manipulación del dúo Mañueco/Igea. Ambos han mentido. En realidad derogan porque ya no es necesario lo que dijeron que no utilizarían por innecesario, pero utilizaron contra los derechos del personal sanitario. Derogan, pero NO por su decisión, sino por la presión de las y los trabajadores de SACYL, por la judicialización, por una iniciativa socialista en las Cortes y el miedo a perder esa votación al haber perdido la mayoría absoluta. Y lo hacen a un mes de que finalice el decreto de alarma y en el inicio de la cuarta ola. ¿Cuál será la próxima ocurrencia de este elenco?

    Hasta ahora les hemos visto incumplir sus compromisos con todos los empleados públicos de la Junta de Castilla y León, de manera especial con los sanitarios, a los que además han castigado con normativas especialmente dañinas como sin ir más lejos este decretazo ahora derogado.

    Una cosa que sorprende y mucho es que siendo el vicepresidente Igea personal sanitario actúe de esta manera contra quienes le apoyaron cuando tuvo sus problemas, y no menores, con el Partido Popular, al que ahora sustenta en el gobierno y maneja a su antojo.

    Parece ser que se aplica con entusiasmo aquello que dice el refrán: “si no puedes vencerlos únete a ellos” y lo hace como los conversos, como los ex algo, con intolerancia y rabia contra quienes estuvieron a su lado.

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